María Celina Suárez Rodríguez

Mujer Cafam Vaupés

Semillas ancestrales para un mejor futuro

En Vaupés la agricultura itinerante o “chagra” es un mecanismo que practican las familias indígenas para la siembra y cultivo de especies nativas propias de la región, con miras a garantizar su alimentación que se complementa con actividades de recolección de frutos, caza y pesca. Y para no perder esta ancestral costumbre, María Celina estudió explotación diversificada y sus pasantías las hizo en la comunidad indígena La Libertad. Allí trabajó un modelo de jaulas flotantes para la cría de pescado nativo, pero debido al robo de los alevinos no tuvo un buen final este emprendimiento. Gracias al SENA empezó a trabajar con las mujeres de su comunidad y presentaron proyectos al Incoder, entidad estatal que les ayudó a fortalecer sus productos sembrados en la chagra como el plátano, la yuca brava y dulce, la piña, entre otros. Además, les recomendaron que se asociaran y emplearan adecuadamente los insumos y elementos aportados al proyecto, por lo que se legalizó la Asociación Mujeres Trabajadoras de la Libertad.En la Asociación trabajan incansablemente para motivar a otras mujeres y seguir vendiendo productos como galletas de wasay, mirití, tortas de copo azul y quinapira (caldo de pescado y ají), hoja de yuca con pescado, carurú con pescado, jugo de wasay, miriti, manivara, cazabe con manibara, tucupi (caldo de pescado con manicuera y ají), casabe y fariña, almidón, almidón deshidratado (harina). El objetivo es seguir vinculando más mujeres y hombres a la asociación para que vuelvan a la chagra, pues ya no se consigue fariña y cazabe, productos nativos de la comida de la región.
¿Quién es María Celina? María Celina nació en Villa Fátima, bajo Vaupés, el 16 de abril de 1966, hace parte de una familia indígena de etnia desana y guanana. Estudió en el SENA de Mitú explotación diversificada, tecnología en especies menores y técnico agropecuario. Desde pequeña quiso ser maestra porque su mamá y sus tías lo fueron; en la Normal de Señoritas siguió su proceso formativo pasando por diseñadora y facilitadora de ambientes de aprendizaje. Dice María Celina que: “Seguiré luchando para que más mujeres y hombres se vinculen a nuestra asociación y volvamos a sembrar nuestras chagras, recuperar muchas semillas y poder transformar estos productos y generar un valor agregado que posibilite venderlos a precios más favorables”.